Bonito y entrañable cortometraje del gran maestro francés Jean-Pierre Jeunet (uno de mis directores favoritos), donde descubrimos por primera vez muchos de sus rasgos característicos, además de a Dominique Pinon (su actor fetiche).
Un homenaje a las "insignificancias" o esos pequeños y originales detalles que llenan nuestras vidas.
Un homenaje a las "insignificancias" o esos pequeños y originales detalles que llenan nuestras vidas.
ME ENCANTA ESTE CORTO!!!!
ResponderEliminarAdela!! Te dejé un premio en mi blog, así que cuando puedas, pasá a buscarlo, je.
ResponderEliminarBesotesss